¿Qué vas a ver aquí?
¿Es el ordenador una herramienta básica para tu trabajo, en la oficina o en casa? ¿Sueles utilizar un equipo informático en tu tiempo de ocio? Si la respuesta es que sí a ambas preguntas, es importante que el ordenador en cuestión rinda bien. Y es que, si estás muchas horas utilizando un equipo, es más que necesario que ese equipo funcione a la perfección.
En resumen, el ordenador nunca debe dejar de ser productivo (para las tareas profesionales) y ágil (para las actividades de ocio, como el gaming o el visionado de vídeos).
Obsolescencia del equipo
Como sabemos, un ordenador, como cualquier equipo tecnológico, acaba siendo obsoleto. Al margen del desgaste o rotura de los componentes, un deterioro que muchas veces aconseja que renueves el PC, un equipo informático puede quedarse atrás.
Y por «quedarse atrás» queremos decir que el ordenador, aún encendiéndose, no funciona bien del todo. Que vaya lento, que se cuelgue. Sí, igual puede hacer algunas tareas con corrección, pero sin la agilidad necesaria.
¿Por qué se queda atrás un PC?
Sobre todo, porque surgen nuevos softwares que necesitan hardwares más potentes. Con cada nueva versión de sistema operativo Windows, ese desfase se hace patente en muchos ordenadores.
Renovar a tiempo
En el mundo de la empresa, ya ha calado la certeza de que renovar es más económico que alargar el tiempo de vida de un parque de PCs más tiempo del necesario. Y los particulares cada vez tienen más claro que un equipo que funciona mal y con lentitud, hace perder el tiempo y puede causar problemas serios. Lo decimos porque, más pronto que tarde, ese mal funcionamiento puede culminar en una pérdida de datos y de información, o en una avería severa del equipo cuando más lo necesitamos.
En resumen, es recomendable cambiar el equipo en el momento adecuado. Para ello, debe saber advertir las señales que te están diciendo a gritos que ese ordenador necesita un reemplazo. En El Blog de BEEP te enumeramos todas las señales a tener en cuenta.
Va lento
Tu ordenador va lento. Todo tarda mucho. Ya sea abrir un archivo. Utilizarlo. Guardarlo. O moverlo.
Una señal clara es si pasa mucho tiempo entre que pulsas el botón de arranque y se muestra el escritorio del sistema operativo. Debería bastar unos segundos, pero podría ser que te diese tiempo a preparar un café y dar los primeros sorbos en el compás de espera.
Otro síntoma es cuando el equipo se cuelga si tienes varias pestañas abiertas en el navegador. También podría pasar que escribas una palabra en el procesador de textos, y lo que escribes no se materialice hasta pasados unos segundos.
Ahora bien, antes de deshacerte de tu PC, averigua si puedes devolver la agilidad a tu equipo. Limpia el disco duro, siguiendo las indicaciones que desde El Blog de BEEP te hemos aportado. Pasa el software antivirus. Y, si hace falta, reinstala el sistema operativo.
Al final, te tienes que guiar por el sentido común. Si el equipo apenas tiene un año, y te va muy lento, es que necesita una limpieza y puesta a punto. Acude a tu tienda BEEP para que te hagan al puesta a punto.
Si el equipo tiene ya una edad, y sigue funcionando con lentitud, ha llegado la hora de adquirir una nueva máquina.
Hace ruidos extraños
Tu equipo hace ruidos extraños. Por supuesto, cuando estás jugando con tu ordenador, o realizando una actividad exigente, el ordenador hará ruido. Ya sea el ventilador, el lector de DVDs o el disco duro.
Pero hay otros ruidos que enseguida adviertes que no son normales. Un sonido de crujido o de clic, u otros ruidos extraños, pueden ser indicios de un disco duro con problemas serios. Es decir, se podría avecinar un fallo inminente.
En relación a los ventiladores, es normal que hagan ruido. Pero si ese ruido es cada vez más fuerte, ello es señal de que el procesador está trabajando con más intensidad de la habitual. O bien es indicio de que hay problemas de sobrecalentamiento.
No puedes instalar el último Windows
¿Recuerdas cuando durabas con el mismo sistema operativo durante años? En el pasado, el recambio de sistema operativo no era prioritario. Sin embargo, los tiempos han cambiado, y la puesta al día del sistema operativo ha pasado a ser crucial. Por aspectos de seguridad, de rendimiento y de adecuación a las nuevas generaciones de software.
Por otro lado, las últimas versiones de sistemas operativos tienden a un desarrollo continuo. Se están actualizando de forma constante. El objetivo es ofrecer regularmente mejoras y novedades.
La pregunta clave es: ¿Puede tu equipo utilizar la últimas versión de sistema operativo?
Se te hace difícil usar softwares y juegos
Los nuevos sistemas operativos exigen más recursos. Lo mismo pasa con el resto de softwares y con los juegos. Cada nueva versión de software es más potente, lo que exige un hardware más capacitado.
Si por trabajo o por ocio haces edición de vídeo o usas CAD, es muy probable que necesites una estación de trabajo profesional.
No puedes conectar los nuevos dispositivos
Si no puedes conectar dispositivos de nueva generación a tu PC, eso significa que tu equipo ya tiene una edad. ¿Trabaja tu actual equipo con Wi-Fi ac, Thunderbolt 3 o USB Type C? ¿Puedes transmitir contenido de forma inalámbrica con tecnologías como Intel® WiDi?
En caso de que tu equipo no esté a la última, toca recurrir a adaptadores y cables. Cada pequeña tarea, se convierte en algo laborioso.
Te has quedado sin suficiente memoria y capacidad de procesador
Si la capacidad del disco duro está siendo aprovechada a tope, la memoria RAM se suele usar en su totalidad.
Otro indicador interesante es el nivel de utilización de la CPU (procesador). Si tiende a sobrepasar el 80%, nos encontramos frente a una señal de que el hardware ya no da más de si.
Agotas el espacio de disco duro
Te has dado cuenta de que necesitas más espacio de disco duro. Si ése es el caso, es muy probable que tu equipo se haya quedado anticuado. Normalmente, si no te dedicas a almacenar archivos pesados por sistema (por ejemplo, muchos vídeos), un ordenador de última generación tiene una alta capacidad de almacenamiento.
El indicador más preciso es el siguiente. ¿Te caben en tu ordenador todos los archivos que empleas en tu día a día? Si tienes que ir transfiriendo constantemente documentos y carpetas a un disco duro externo, eso quiere decir que necesitas un nuevo ordenador.
Es más económico un nuevo equipo que la reparación
Llega un momento en que cuesta más actualizar el ordenador (sustituir componentes en un equipo de sobremesa) que reemplazarlo por uno nuevo. A partir de cierta edad del PC, es más interesante invertir en un nuevo equipo.
El dilema de poner nuevas piezas o comprar un PC nuevo suele llegar cuando llevas el equipo a reparar
El equipo ya no da más de sí
Los ordenadores tienen un ciclo de vida. A partir de cierto momento, podemos considerar que un equipo es obsoleto. Igual sí que lo puedes emplear para consultar emails y para navegar, pero seguro que estás teniendo enormes dificultades para usar un juego o un software de oficina.
Visto de otra manera, un síntoma diáfano de que necesitas un recambio es que te pasas más tiempo solucionando problemas, que usando el ordenador. Día sí, y día también, se te cuelga Windows. Sufres fallos aleatorios en el sistema. Las aplicaciones te dan errores. Eres testigo de la tan temida pantalla azul de la muerte de Windows.
El portátil se sobrecalienta y solo funciona enchufado
En este contenido, hemos hablado de ordenadores personales de forma global. Pero los portátiles tienen sus especificidades, que merecen un capítulo aparte.
- ¿Pesa demasiado? ¿Ir de viaje con el portátil es una tortura?
- ¿Se calienta en exceso?
- ¿Solo funciona conectado a la electricidad?