¿Qué vas a ver aquí?
Los portátiles son herramientas. Para el ocio, para la socialización, para el trabajo, para la educación y para muchas otras cosas. Y, como herramientas que son, se ensucian. Con el paso de los días, semanas, meses y años, se va acumulando suciedad y mugre. En el teclado, en el marco de la pantalla, en la pantalla y en el trackpad (pequeña superficie sensible al tacto que permite reemplazar al ratón). En los puertos y en otros rincones. Y, por supuesto, en el interior del equipo.
No es ningún gran descubrimiento que los objetos de uso diario o casi diario pierden lustre, se pueden manchar y se pueden volver feos.
Está claro que, si no limpias de forma periódica, el uso continuado del portátil puede restar atractivo a tu equipo. Además, hay factores que pueden acelerar e intensificar el deterioro estético. Destacan la contaminación y la suciedad del ambiente; la suciedad de tus dedos y manos; y la grasa de tu piel. Todo ello contribuye a que tu equipo vaya perdiendo el impecable aspecto que tenía cuando lo estrenaste.
La satisfacción de usar un ordenador en estado de revista
Tener encima de la mesa un portátil limpio y reluciente, en estado de revista, es casi tan satisfactorio como tener un equipo nuevo.
Aunque tu ordenador portátil tenga ya tres años, si las teclas están lustrosas, y si la pantalla está libre de polvo y de manchas, te vas a volver a enamorar del dispositivo
Por eso es tan importante seguir una rutina de limpieza del equipo. En este artículo de El Blog de BEEP te ofrecemos las pautas.
Las inagotables ventajas de mantener hábitos de limpieza
Si adquieres el hábito de limpiar y mantener en buen estado tu portátil, acabarás aplicando esas habilidades en otros equipos informáticos y electrónicos que no dejas de manipular y de toquetear a lo largo del día y de la semana. Son dispositivos que, con tanto contacto, acaban sucios. Algunos de esos productos tecnológicos pueden acabar siendo un auténtico almacén de bacterias. ¿Te has detenido a echar un vistazo al mando de tu televisión?
Objetivo ‘Portátil limpio’: ¿Qué necesitas?
Para dejar el ordenador en un estado impecable, no necesitas demasiadas cosas. Cuatro materiales no pueden faltar:
Alcohol para frotar, también conocido como alcohol isopropílico
¡No confundir con el alcohol para curar heridas! Lo puedes encontrar en hipermercados y en grandes superficies especializadas dedicadas al bricolaje y al do it yourself (háztelo tú mismo). A tener muy en cuenta: es un producto inflamable, por lo debes utilizarlo con mucha prudencia.
El alcohol isopropílico en una concentración del 70% es ideal, ya que no dañaría los componentes internos. En todo caso, siempre es bueno probar en una parte no visible del equipo.
Si la mugre o la grasa se resisten, una esponja de melamina puede obrar milagros. Ahora bien, hay que ir con cuidado, porque es un material abrasivo.
Paños de microfibra
Los puedes encontrar en cualquier droguería o supermercado. Utiliza paños limpios.
Bastoncillos de algodón
Sí, nos referimos a los bastoncillos de algodón que casi seguro que guardas en el lavabo para limpiarte los oídos. También se conocen como hisopos o cotonetes. Se trata de un producto muy accesible, que puedes encontrar en una gran diversidad de comercios minoristas.
Ah, aprovechamos para decir que, en los últimos años, médicos y expertos han ido desaconsejando el uso de estos bastoncillos para la limpieza del canal auditivo. En todo caso, seguro que les vas a dar un buen empleo en un mantenimiento óptimo de tu portátil.
Los bastoncillos se emplean sobre todo para los espacios entre las teclas. Para una limpieza eficaz, debes humedecerlos con el alcohol para frotar.
Aire comprimido
Puedes comprar el aire comprimido en tu tienda BEEP.
Al margen de estos productos o utensilios, podrás encontrar una gran gama de artículos de limpieza especializados. Seguro que funcionarán bien, pero no son estrictamente necesarios y van a incrementar notablemente tu presupuesto. Por tanto, te aconsejamos que te ciñas a la lista de ítems que te hemos apuntado.
Primera fase: el interior
Tienes todo el material de limpieza preparado. De modo que tu mugroso portátil está preparado para la Operación Limpieza. Ha llegado el momento de ponerte manos a la obra.
Lo más tentador es empezar con el teclado, que es lo más visible. Pero te recomendamos que comiences por el interior. Una vez hayas empleado el aire, entenderás por qué te desaconsejamos limpiar teclas, carcasa y pantalla primero. Y es que, con el aire comprimido, extraerás migajas, pelos y otras cosas diminutas que ni sospechabas que pudiesen esconderse ahí dentro. Y todos esos residuos acabarán en la superficie visible del equipo.
¿Preparados para empezar? Antes de hacer nada, te tienes que asegurar de que el equipo esté apagado y desconectado del enchufe. Asimismo, extrae la batería, si es que lo puedes hacer sin mayor problema.
Echa mano del aire comprimido
Coge el spray de aire comprimido, y dispara una ráfaga rápida lejos del portátil, para deshacerte de la condensación acumulada. Ahora ya puedes aplicar el aire en todos los huecos, recovecos, agujeros y hendiduras. Es decir, el perímetro de las teclas, orificios de ventilación, puertos USB…
Realiza descargas breves, para evitar que se acumule la humedad en el interior del equipo.
Dirige el spray con una ligera inclinación. Si lo aplicas frontalmente, lo que estarás haciendo es esparcir la suciedad.
Con este procedimiento, la idea es evitar que se acumule el polvo con el paso del tiempo. Y es que el polvo es uno de los principales enemigos de los equipos informáticos, ya que favorece el tan temido sobrecalentamiento
¿Cuándo necesitas una limpieza a fondo o profesional?
Si tienes un portátil viejo o relativamente viejo, y no has hecho nunca limpieza ni ningún tipo de mantenimiento, las entrañas del equipo podrían acumular pelusillas y grandes montículos de polvo.
En ese caso, deberás abrir el equipo. En este punto, te aconsejamos que lo lleves a tu tienda BEEP para que le realicen una limpieza profesional a fondo.
Malos hábitos y factores a tener en cuenta
Es bueno saber que el ritmo a que se ensucia un portátil depende de los hábitos del usuario y de las condiciones del hábitat del equipo. ¿Comes enfrente del portátil? ¿Te lavas las manos con poca frecuencia? ¿Eres fumador? ¿Tienes animales domésticos, con la abundancia de pelos y otras partículas que ello conlleva?
Ahora, a por el exterior
Esta fase es la que va a hacer que el portátil luzca como nuevo. Una vez está limpio por dentro, toca que esté impecable por fuera.
Nunca apliques productos de limpieza de forma directa en el portátil
Para este trabajo de limpieza, debes tener a mano todo el material que te hemos indicado más arriba. Es crucial que nunca apliques el alcohol de limpieza de forma directa sobre el equipo. Hazlo sobre el paño de microfibra y sobre los bastoncillos.
Moja el paño con unas pocas gotas de alcohol, asegúrate de que no gotea, y ponte a limpiar.
Los bastoncillos untados con un poquito de alcohol son perfectos para las teclas y para los espacios existentes entre ellas.
Sé perseverante
Debes tener paciencia, porque muchas veces deberás pasar el paño o el bastoncillo más de una vez por el mismo lugar para conseguir el resultado deseado.
Ten en cuenta que siempre habrá cosas que no podrás solucionar. ¿Te has fijado en esas teclas desgastadas, a las que incluso se les está borrando la letra, el número o el símbolo? Pues bien, esas teclas ya nunca van a recuperar el aspecto que tenían cuando compraste el portátil.
Por tanto, poco puedes hacer para frenar el desgaste natural del teclado. Eso sí, lo que puedes hacer es frenar ese deterioro, reduciendo la fuerza con la que presionas las teclas a la hora de mecanografiar. Y es que muchos usuarios, más que teclear, aporrean las teclas.
La pantalla
La pantalla es una parte delicada. Para eliminar el polvo y señales de dedos, utiliza un paño seco de microfibra. Si necesitas más potencia limpiadora, aplica unas gotitas de agua al paño. Recuerda: no eches nunca el agua de forma directa sobre la pantalla. Cerciórate de que el trapo no gotea, y ponte a limpiar con el máximo cuidado.
Otra opción, propuesta por algunas marcas, es utilizar una mezcla al 50% de alcohol de frotar y de agua. Nunca, nunca recurras a productos de limpieza.
Un portátil con olor a nuevo
En casos de suciedad extrema, el portátil puede desprender un olor desagradable.Y, a pesar de haber seguido todos los pasos descritos hasta ahora, el equipo puede seguir emanando ese hedor.
Si el usuario es un fumador, es probable que el olor a tabaco haya impregnado el equipo. Por mucho que lo hayas eliminado de la superficie, ese olor podría estar aún adherido a los componentes del interior.
Para que el portátil vuelva a lucir y a oler como nuevo, debes recurrir al mejor desodorante natural: el carbón.
Una buena idea es la arena para gato. Y es que la mayoría de las fórmulas de arena para gato poseen carbón activo para neutralizar los malos olores. Introduce el portátil en una bolsa sellada o en una caja con tapa, junto con una taza de arena para gato. Deja así el equipo durante unas 24-48 horas. Si lo puedes alargar más tiempo, mejor. El olor de la taza contrarrestará el mal olor del dispositivo.
Cuando vuelvas a abrir el portátil, ya habrá perdido ese aroma desagradable.