Del entusiasmo a la desidia. De la adicción al aburrimiento. Facebook nació como un servicio para universitarios y gracias a ellos creció hasta llegar a más de mil millones de usuarios. Ahora tiene un problema precisamente con sus mejores embajadores, los adolescentes. Mark Zuckerberg, creador y consejero delegado de la red social, ha reconocido que ya no son tan atractivos para los adolescentes. Así lo declaraba en el informe anual para los inversores: “Creemos que algunos de nuestros usuarios, en especial los jóvenes, están a la última y buscan de manera activa otros productos similares o como sustituto de Facebook”. Añade que esto puede dañar su negocio a medio plazo.
Sigue leyendo en El País