¿Qué vas a ver aquí?
El 26 de mayo de 1927, se hizo historia. John Logie Baird, creador de la televisión electromecánica, transmitió una señal de televisión desde Londres hasta Glasgow, en Escocia. Lo hizo a través de las líneas de teléfono. La señal viajó más de 700 kilómetros, desde la capital de Reino Unido hasta el Central Hotel, en la estación de tren de Glasgow. Se trataba de la primera transmisión de larga distancia de imágenes televisivas.
En 1928, la empresa Baird Television Development Company (BTDC) hizo la primera transmisión televisiva transatlántica, entre Londres y Nueva York.
Desde finales de los años 20, hasta ahora, han pasado 90 años. Cerca de un siglo más tarde, lo que era un aparato de tecnología revolucionaria, pero rudimentaria, se ha convertido en un equipo con unas prestaciones impresionantes.
Desde las primeras pantallas experimentales de finales de los años 20, pequeñas, poco brillantes y con pocas líneas de resolución, se ha pasado al 4K. El 4K equivale a una resolución de 3840×2160 píxeles. Se trata de una definición con la que podemos ver cada detalle con una precisión inimaginable solo unos años atrás.
A continuación, repasamos las grandes innovaciones de la televisión de las últimas décadas y años.
Tubo de rayos catódicos
Si tienes cierta edad, habrás comprado alguna televisión entre finales de los años 60 y los años 2000. En esos años, se vendían las televisiones de tubo catódico. Para ser más exactos, la tecnología era el tubo de rayos catódicos. En inglés, CRT, de Cathode Ray Tube.
Esta tecnología permite visualizar imágenes mediante un haz de rayos catódicos, con electrones rojos, verdes y azules. El haz está siempre dirigido contra una pantalla de vidrio recubierta de fósforo y plomo. Los rayos escanean la mencionada pantalla oscura, generando miles de puntos rojos, verdes y azules para crear la imagen.
Desde finales de los años 20 y hasta el año 2000, el tubo de rayos catódicos fue una tecnología predominante. No fue hasta 2007 que las ventas de las pantallas planas superaron a las ventas de las teles de tubo catódico.
Como curiosidad, podemos decir que la calidad que ofrecía el tubo catódico era consistente. En todo caso, con la llegada de la alta definición, la calidad de la imagen subió mucho el listón. Y, claro, el tubo catódico quedó obsoleto
LCD vs Plasma
Las pantallas planas surgieron a finales de los años 90. La primera ventaja que ofrecían era el menor espacio. Asimismo, pesaban menos, por lo que podían montarse en la pared. Para los más cinéfilos, un atributo importante era el tamaño. Una pantalla de más de 40 pulgadas era, para aquellos entonces, una pantalla muy grande.
En aquellos inicios de la pantalla plana, se podía escoger entre LCD y plasma.
Los equipos de plasma conseguían niveles de negro y un contraste superiores, así como unos mejores ángulos de visión. Asimismo, proporcionaban mayores tasas de refresco. Es decir, cuando en la pantalla se sucedían imágenes con rapidez (una escena de acción), el espectador las veía menos borrosas que con una tele LCD.
Sin embargo, las teles de plasma era menos eficientes desde un punto de vista energético. Cuando el precio de las pantallas LCD cayó, perdieron popularidad en favor de las tecnologías LCD y LED. En 2014, Panasonic y otros fabricantes dejaron de producir los equipos de plasma.
Televisión digital
La televisión digital ha transformado la forma en que vemos la televisión. En España, una vez se completó el apagón analógico, era indispensable disponer de un televisor con un sintonizador digital. En su defecto, había que utilizar un sintonizador TDT (ATSC, ISDB-T o DVB-T) externo. Este dispositivo debía procesar la señal digital y enviarla al televisor. Solo así se podía sintonizar y ver la transmisión en la pantalla .
Con la televisión digital, se potenciaban aspectos que aprecian muchos televidentes, como los subtítulos. Asimismo, se incorporaba la radio digital.
Alta Definición
La televisión de Alta Definición (High Definition) ofrece 1280×720 píxeles (720 píxeles de altura). El Full HD, o Full High Definition, proporciona 1920×1080 píxeles (1080 píxeles de altura). En los últimos años, estamos subiendo el nivel desde el Full HD hasta la calidad 4K/Ultra HD.
Una imagen de alta resolución ofrece más píxeles y, por tanto, más líneas. Gracias a esa mayor densidad, la imagen es más precisa, detallada y repleta de color. Como anécdota, recordemos que con el advenimiento de la alta definición, algunas estrellas televisivas mostraron inseguridad. El motivo es que arrugas y defectos estarían más a la vista.
En los últimos años, las diferentes televisiones han trasladado sus emisiones a un canal de alta definición
3D
A principios de los 2010, el 3D prometía ser la nueva gran tendencia en el mundo de la televisión. En los años 50, las tres dimensiones ya se habían probado, sin suficiente éxito, en las salas de cine. Una de las películas que se proyectó en 3D fue la remarcable Dial M for Murder (1954, Crimen Perfecto), de Alfred Hitchcock. Más de medio siglo más tarde, el filme Avatar (2009) arrasó, por su valor cinematográfico y por el acertado empleo del 3D.
La cosa pintaba bien. Todo apuntaba a que las teles 3D podrían ser un auténtico fenómeno. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de los fabricantes, la TV en 3D no tuvo el éxito que se esperaba. No a todo el mundo le gusta llevar las gafas de visión de 3D. Y, por otro lado, para apreciar el potencial de la tecnología al 100%, necesitas sentarte justo enfrente de la pantalla.
En todo caso, es una tecnología con mucho potencial y que seguirá incorporando mejoras.
Televisión LED
A mediados de los años 2010, las pantallas de LED se popularizaron. Se trata de una tecnología similar al LCD. La gran diferencia es que emplea diminutos LEDs como luz de fondo, en lugar de lámparas CCFL.
Hay dos tipos de televisión LED. Los paneles con el borde iluminado tienen lámparas alrededor del borde de la pantalla. Esa disposición permite que la pantalla sea más delgada y energéticamente más eficiente. Los paneles con retroalimentación tienen LEDs por toda la parte trasera de la pantalla. Ello significa que la imagen es más consistente y de más calidad.
Smart TV
Las Smart TV tienen conectividad a internet (vía cable o vía WiFi) y pueden albergar APPs de todo tipo. Solo con una Smart TV vamos a poder consumir contenidos de las plataformas online (Netflix, HBO, Disney, etc) o de la versión online de los canales convencionales.
Son unos equipos imprescindibles. Durante los últimos años, su precio se ha convertido en muy asequible.
OLED
Las teles OLED (Organic Light Emitting Diode) son una variación del LED, pero sin la iluminación trasera. Gracias a la ausencia de esa iluminación, estas pantallas pueden ser increiblemente delgadas.
Cada píxel se enciende de forma individual. Por esa razón, cuando están apagados, los negros son muy profundos. Los paneles OLED tienen un tiempo de respuesta 1000 veces más rápido que el LED. Esta característica las convierte en teles ideales para ver deportes en los que la velocidad es importante.
Importante: la tecnología OLED permite que la pantalla sea flexible.
Plataformas online de contenidos
En los primeros tiempos de la televisión en España, solo había un canal disponible. Más tarde, llegó un segundo canal. Y décadas más tarde, aterrizaron las autonómicas y las privadas. Con el TDT, la oferta se volvió a ampliar.
Pero ha sido con las plataformas online de suscripción, como Netflix o HBO, que el televidente tiene más oferta disponible que nunca. Y la puede disfrutar en el momento que desee. El telespectador ya no depende de la programación. Ya no depende de los caprichos, deslices y cambios del programador de turno.
Ultra HD o 4K
Para que un equipo sea clasificado como 4K o Ultra HD, debe tener una resolución mínima de 3840×2160 píxeles.
La resolución 4K, o 4.000 (K equivale a 1.000), se refiere al número de píxeles que hay en cada fila de la pantalla. Es decir, el número de píxeles que hay en cada línea que va de izquierda a derecha, o bien de derecha a izquierda.
La ventaja de este tipo de imagen es el nivel de detalle. Si en un partido de fútbol enfocan el rostro de un jugador, veremos las gotas de sudor. Y si un documental de naturaleza nos acerca al fondo marino, apreciaremos el fondo marino como nunca (desde el sofá de casa)
Las televisiones 4K son cada vez más asequibles. Otra buena noticia es que cada vez más productores de contenidos están trabajando con estos estándares de definición.
