¿Qué vas a ver aquí?
Si eres de aquellos que llevan el móvil a la playa, esta lista de consejos para protegerlo del sol, de la arena y del agua te será de gran ayuda.
Proteger el móvil contra agua salada, arena y sol
Solemos llevarnos dispositivos tecnológicos a la playa, junto con toallas y crema solar. Ya sea para utilizarlos o simplemente para tenerlos a mano, metemos móvil o tablet en la mochila o bolso. ¡No podemos pasar sin tecnología, ni siquiera cuando tomamos el sol con vistas al mar azul!
Pero debemos tener en cuenta que móviles, tablets y otros dispositivos no son nada amigos de la playa.
- El agua salada es muy corrosiva.
- La arena de la playa puede dañar la pantalla y —al introducirse en el móvil— el interior del dispositivo. Los granos de arena son incluso un desafío para los equipos tecnológicos de uso militar. Así que, para smartphones o tablets de uso civil o comercial, el problema es aún más serio.
- Los rayos de sol y las altas temperaturas pueden causar un grave daño a los componentes internos del móvil o tablet.
En este post te ofrecemos una lista de consejos para proteger móvil y tablet cuando te los llevas a la playa.
Opta por un móvil resistente al agua
El primer consejo es elegir un smartphone resistente al agua.
La resistencia al agua se mide a través de la certificación IP (Ingress Protection), que consta de dos dígitos.
- El primer dígito indica la resistencia del dispositivo a partículas sólidas como el polvo.
- El segundo dígito señala la resistencia a líquidos, incluyendo el agua.
Dos clasificaciones comunes para móviles resistentes al agua son IP67 e IP68. Como curiosidad, se pronuncian «IP seis siete» e «IP seis ocho», respectivamente.
Con estas certificaciones sabrás que el smartphone tiene protección frente a partículas de polvo y que lo puedes sumergir en agua durante un tiempo especificado por el fabricante.
- IP67 garantiza una inmersión segura en hasta un metro de profundidad.
- IP68 amplía la garantía de seguridad a más de un metro de profundidad.
¿Hay móviles a prueba de agua?
No, no hay móviles a prueba de agua. Los smartphones no están pensados para bucear ni para llevarlos encima mientras nadamos.
Dos ideas importantes:
- No hay ningún móvil en el mercado que sea a prueba de agua, en el sentido de que lo puedas sumergir de forma indefinida en el agua sin riesgo de daño. La protección frente al agua de los móviles está pensada para que el móvil sobreviva a exposiciones accidentales (se ha derramado un vaso) o a la lluvia.
- La resistencia al agua indicada a través del certificado IP es una referencia importante. Sin embargo, en términos prácticos, solo hay garantías del nivel de protección indicado en los primeros días de uso del dispositivo después de estrenarlo. Los fabricantes de móviles advierten que el desgaste normal del smartphone por su uso diario puede degradar su resistencia al agua. La protección que el terminal ofrece por defecto puede resultar seriamente comprometida por cualquier caída al suelo que pueda crear brechas en puntos que supuestamente están sellados de forma hermética.
Tomemos como ejemplo móviles como el iPhone XS y el iPhone XS Max. Con una certificación IP68, estos modelos podrían estar sumergidos en hasta 2 metros de profundidad durante un máximo de 30 minutos. Sin embargo, Apple advierte: «Las resistencias a salpicaduras, agua y polvo no son una condiciones permanentes y la protección podría reducirse como resultado de un uso normal [del móvil]».
Lo mejor es no meter el móvil o la tablet dentro del agua de forma voluntaria.
Móvil fuera del coche
Si te llevas el móvil a la playa, asegúrate de que lo llevas contigo hasta la arena y no lo dejas en el coche. Aunque aparques el vehículo a la sombra, guardar el smartphone en la guantera es una mala idea. Esto se debe a que las temperaturas en el interior del coche pueden ser muy elevadas.
De hecho, es absolutamente desaconsejable dejar cosas y, sobre todo, personas, dentro de un coche en días calurosos. Además, dejar tus dispositivos en el vehículo, sobre todo si están a la vista, puede ser una invitación para los ladrones.
Protege tu móvil a la sombra del parasol
Las temperaturas extremas son malas para el móvil. Tanto las muy frías como las muy calientes.
Un consejo básico cuando quieres llevar tecnología —móvil, tablet, portátil, etc— a la playa es usar sombrilla.
Gracias al parasol vas a tener a la sombra todos tus gadgets, convenientemente guardados en una bolsa adecuada para una protección más efectiva.
Ten en cuenta que las pantallas táctiles y los dispositivos en su conjunto, absorben mucho calor. Y no hay nada peor para un producto de electrónica como el móvil que se sobrecaliente por la exposición directa al sol.
Bolso o mochila de playa para proteger el móvil
Las bolsas diseñadas de forma específica para la playa son una primera barrera de protección del móvil o tablet.
Busca un bolso o mochila robusto, impermeable, con cierre y con compartimentos para guardar las cosas.
Una bolsa pensada para la playa es un gran paso para proteger el dispositivo tecnológico de forma adecuada.
Bolsas de plástico con autocierre
Es probable que utilices bolsas de plástico de autocierre para congelar alimentos. Pues bien, te proponemos un uso alternativo a estas bolsas, que son tan baratas como eficientes para proteger al móvil de arena y agua.
Se trata de una solución ideal si no quieres gastarte dinero en una funda impermeable. No es una opción glamurosa, sino 100% práctica.
- Puedes mantener el smartphone dentro de la bolsa en todo momento, porque deberías poder usar la pantalla táctil a través del plástico transparente. Solo deberías sacar el móvil para hacer o recibir una llamada.
- Para utilizar la pantalla táctil a través de la bolsa de autocierre, deberás sostenerla de manera que el plástico se extienda bien encima de la pantalla.
Las bolsas para congelar son especialmente efectivas para proteger el móvil de la arena.
Los granitos de arena pueden ser muy lesivos para el dispositivo. Pueden rayar la pantalla y obstruir el puerto de carga y la rejilla del altavoz.
Funda de móvil resistente al agua y a la arena
Una funda resistente al agua y a la arena puede aumentar el nivel de protección. Es una buena idea si vas a usar el móvil durante un buen rato durante tu tiempo en la playa.
También es una buena idea usar correas ergonómicas o cintas para el cuello para evitar, por ejemplo, que el móvil caiga en la arena.
Crema solar, bien lejos para proteger la pantalla
Evita usar el móvil con las manos manchadas de crema solar. Este producto tan necesario para la protección de tu piel, puede dañar la pantalla de forma permanente y afectar la sensibilidad táctil.
Uso moderado del móvil en la playa
Un buen consejo para proteger el móvil en la playa es limitar el uso de las apps. Utiliza el mínimo tiempo posible apps (Pokémon GO, una plataforma de streaming, etc) o juegos que exijan un gran consumo de la batería. Así evitarás el sobrecalentamiento del smartphone como resultado de ese uso intensivo del dispositivo.
Modo Avión si hay poca señal
Si tienes una señal débil o inexistente, pon el smartphone en modo Avión para evitar que esté de forma constante buscando una red. Esa búsqueda permanente de señal gastará batería y puede contribuir a sobrecalentar el móvil.
Móvil en posición elevada
Puede parecer innecesario decirlo, pero nunca habría que usar el móvil encima de la arena o en una superficie mojada. Así evitarás la arena y el agua. Si estás sentado en una toalla, utiliza una toalla adicional convenientemente doblada sobre la que poner el smartphone.
¿Qué hacer si salpicas el móvil con agua de mar?
Si tu móvil resistente al agua se expone de forma accidental al agua salada, es recomendable seguir estos pasos para minimizar los posibles daños:
- Apaga el móvil. Lo primero que debes hacer es apagar el móvil inmediatamente para evitar cortocircuitos.
- Enjuaga con agua dulce. Utiliza agua dulce a baja presión, ya sea del grifo o de una botella, para enjuagar el dispositivo y eliminar la sal.
- Evita el uso de cualquier otro tipo de líquido, ya que podría causar daños.
- Elimina el exceso de agua. Agita suavemente el dispositivo para deshacerte del exceso de agua sin dañar los componentes internos.
- Sécalo con un paño suave. Usa un paño limpio y suave de microfibra para secar de forma cuidadosa el móvil y eliminar cualquier rastro de agua.
- Absorbe la humedad. Coloca el móvil en un recipiente junto con paquetes de gel de sílice, que ayudarán a absorber la humedad. Deja reposar el dispositivo durante 24-48 horas.
- Verifica su funcionamiento. Después de haber seguido estos pasos, enciende el móvil y verifica si funciona correctamente. Si notas algún problema en su funcionamiento, te recomendamos llevarlo a un centro de reparación para una evaluación profesional.
Estos pasos te ayudarán a aumentar las posibilidades de recuperar el funcionamiento normal de tu móvil después de la exposición al agua salada.
Es muy importante que sigas todos los consejos de esta lista para garantizar que los dispositivos móviles sobrevivan a un día en la playa sin daños.
