¿Qué vas a ver aquí?
El monitor es una de las herramientas más importantes del teletrabajo. Primero, porque influye en tu rendimiento y productividad. Segundo, porque es la ventana a través de la cual sigues en contacto —virtual— con compañeros de trabajo, clientes y proveedores. Y tercero, porque tiene un gran impacto en tu salud y comodidad.
Aprovechamos la campaña de promoción especial de monitores, de uso profesional o familiar, para explicarte todo lo que debes tener en cuenta cuando elijas una nueva pantalla para tu ordenador de sobremesa, o en caso de querer trabajar con el portátil apoyándote en un monitor grande.
Promoción: amplia selección de monitores, al mejor precio
Si tienes que renovar un monitor, o necesitáis más monitores en casa, ahora es el momento. La tienda online de BEEP ha hecho una selección de monitores para todos los gustos y para todos los usos; para trabajar, para jugar o para toda la familia. Todos, con unos precios increíbles. La promoción es válida hasta el 18 de abril de 2021.
Descubre los monitores de la promoción
¿Un portátil para teletrabajar?
Muchos trabajáis desde casa con un portátil. Se trata de un equipo versátil y apropiado para aquellos profesionales que están en constante movimiento. Sin embargo, si estás haciendo teletrabajo, lo más recomendable es un ordenador de sobremesa, con su correspondiente monitor. Lo agradecerán tu vista y tu espalda, y también lo notará tu rendimiento laboral y profesional. Y es que una pantalla de 15 pulgadas (un tamaño habitual en portátiles) no es la más adecuada para jornadas de ocho o 10 horas al día.
Piensa que son jornadas maratonianas con hojas de cálculo, saltando de una aplicación a otra o abriendo al mismo tiempo, una al lado de la otra, dos ventanas de diferentes programas, páginas de navegador, documentos de Word o Excel, etc.
No hay color: la experiencia de uso y de trabajo con un monitor es mucho mejor que con la pantalla de un portátil
Tamaño y resolución del monitor
La dimensión y la resolución del monitor es la primera decisión que debes tomar. ¿Por qué mencionamos una cosa junto a la otra? Pues porque se trata de dos parámetros que van de la mano. Cuanto más tamaño quieras, más resolución necesitas.
Más superficie de pantalla donde ver y donde trabajar redunda en una mayor productividad. La dimensión idónea de monitor para cualquier trabajo de oficina se sitúa en el rango de 24-32 pulgadas. Con ese tamaño, va a ser mucho más agradable gestionar el correo electrónico, navegar por Internet y trabajar con documentos de ofimática (programas de Microsoft Office o similares).
¿Necesitas un monitor muy grande?
Para ciertos trabajos —no hace falta ser un trader de bolsa— es prioritario disfrutar de una gran superficie de pantalla. En esos casos, ¿por qué no trabajar con dos monitores? ¿Y qué tal, si tienes presupuesto, probar con un monitor curvo ultraancho? Su tamaño suele estar en el rango de 34-49 pulgadas.
Si deseas juntar dos o más monitores, presta mucha atención al marco: que sea fino. De ese modo tu configuración multimonitor es fluida y hay un continuum: tienes dos pantallas pero parece que solo tienes una.
Compara nuestros monitores de mayor tamaño en oferta
¿Por qué podrías necesitar un monitor de mucho tamaño?
Un monitor enorme es ideal para las personas que trabajan con datos o con imágenes.
Datos
Trabajadores del sector financiero, programadores y analistas de datos, entre otros, se benefician de una superficie de pantalla de entre 43 y 49 pulgadas.
Imágenes
Profesionales del diseño gráfico y web, del marketing y del mundo audiovisual, necesitan monitores de superficie generosa.
Un monitor más grande requiere más resolución
Los monitores más grandes exigen una resolución más alta. Así, por ejemplo, una pantalla de 27 pulgadas (68,58 centímetros) debería ir asociada a una resolución de 2560 x 1440 píxeles. En un monitor de 34 pulgadas (86,36 centímetros), la resolución adecuada es de 3440 x 1440. En ambos casos disfrutamos de más de 100 píxeles por pulgada.
Relación entre tamaño y distancia de los ojos
Comprar un monitor pequeño va a empeorar tu experiencia de teletrabajo. Y también se puede resentir tu rendimiento si la pantalla es excesivamente grande.
Además de los criterios que te hemos apuntado, ten también presente la distancia entre silla y monitor:
- 1 metro de distancia: 24 pulgadas (1080 píxeles)
- 1,5 metros de distancia: 35 pulgadas (1080 píxeles)
Una dimensión adecuada es la que te permite abarcar toda la pantalla sin mover la cabeza.
Ergonomía y bienestar
Una persona que trabaja desde casa pasa muchas horas frente al ordenador. Por ese motivo, la ergonomía de su espacio de trabajo es fundamental: silla, teclado y monitor son factores a tener en consideración.
El monitor influye mucho en tu ergonomía. Piensa que tiene impacto en la postura que adoptas, y en la salud de tu espalda, de tu cuello y de tu vista.
Monitor ajustable
Es aconsejable que el monitor se puede ajustar: altura y ángulo.
Luz azul ultrarreducida
Por otro lado, si vas a pasar mucho tiempo pegado a la pantalla o si tienes que ponerte a acabar informes después de cenar, vale la pena que elijas un equipo con luz azul ultrarreducida. Así tus ojos no van a tener que hacer tanto esfuerzo. Además, prevendrás problemas de sueño por culpa de la luz azul.
Brillo de la pantalla
Según donde sitúes el monitor, deberás escoger un monitor con más o menos brillo.
Si tu espacio de trabajo está muy bien iluminado de forma natural, probablemente necesitarás más brillo. Puede parecer extraño, pero recuerda lo difícil que se te hace ver la pantalla de tu smartphone cuando estás en la calle y el sol te da de pleno. El brillo ayuda a que la pantalla se vea mejor.
El brillo máximo se cuantifica en candelas por metro cuadrado (cd/m2). Cuando una imagen se muestra en tu monitor, los fragmentos más brillantes de la imagen pueden llegar a alcanzar ese brillo máximo.
- Poca iluminación: elige un monitor con 250 cd/m2
- Hay luz: necesitas un monitor de 250-300 cd/m2
- Mucha luz natural disponible: apuesta por un monitor de 300-350 cd/m2
¿Qué quieres conectar al monitor?
Se trata de una cuestión básica a valorar cuando se elije cualquier equipo o dispositivo tecnológico. ¿Qué equipos quieres conectar al monitor?
¿Deseas conectar tu portátil al monitor? Si es así, chequea los puertos del portátil para que ambos equipos sean compatibles. Un monitor con conexión USB-C te pone las cosas muy fáciles: te permite cargar el portátil, así como transferir datos y señales de audio y vídeo.
Si eres de los que les gusta conectar dispositivos, asegúrate de que el monitor cuente con varios puertos USB
Eficiencia energética
El monitor puede estar encendido muchas horas, así que la eficiencia energética es un factor a tener en cuenta. Mira si el equipo tiene la certificación Energy Star.
Los monitores más modernos cuentan con funciones que reducen el consumo de luz. Se ponen en modo sleep, por ejemplo, tras un período de inactividad.
Color del monitor
¿Necesitas un monitor para hacer edición de vídeo y de imagen? Presta atención entonces a los siguientes aspectos: cobertura, precisión y calibración del color.
Si trabajas en diseño, el color es una característica crucial de tu trabajo, así que debes buscar un equipo con mucha precisión de color.
El espacio de color es el espectro de colores que un monitor es capaz de exhibir. Hay varios espacios de color, como sRGB, AdobeRGB y DCI-P3.
Las marcas informan sobre qué porcentaje de ese espacio de color puede el monitor cubrir de forma fidedigna.
Con DCI-P3, consigues el espacio de color más ancho. Si eres un profesional que necesita unos colores vívidos y precisos, tienes que exigir un equipo DCI-P3 con una cobertura de más del 95%.
Webcam incorporada
Probablemente, ahora haces más videoconferencias que nunca. Puede ser una buena idea que el monitor lleve incorporada la webcam, el micrófono y los altavoces.
Diseño y estética del monitor
Se trata de un monitor de trabajo que vas a utilizar en casa, ya sea en un despacho o en un espacio que hayas habilitado en algun salón o habitación. Como es un equipo que va a formar parte del paisaje de tu hogar, deberías darle cierta relevancia a la estética y el diseño del monitor.
Te tienes que fijar en el diseño del marco y del soporte, en el color de todo lo que no es pantalla y en los materiales de que está hecho el equipo. La idea es que el monitor encaje en el diseño de interiores de tu casa y de tu espacio de trabajo.
Si te interesa la estética, igual es una buena idea que el marco sea muy fino, lo que a su vez facilita poner un monitor al lado de otro.
